Tras dos años de Restauración Borbónica, Alfonso XII juró la nueva Constitución de 1876, redactada por Cánovas del Castillo, con lo que Alfonso XII se convirtió en rey constitucional.
Dos fueron los pilares de Canovas para asegurarse el éxito de la Restauración Borbónica:
- La necesitad de aprobar una Constitución en la que figurará la legitimación de la monarquía y en la estuvieran de acuerdo todos los partidos, principalmente los dos principales
- La alternancia en el poder de los partidos políticos, cosa que no se consiguió formalizar hasta la muerte de Alfonso XII en 1885 (Pacto del Pardo). A pesar de ello, Alfonso XII forzó un cambio de gobierno en 1881, tras seis años de gobierno conservador de Cánovas para dar paso a un gobierno liberal liderado por Mateo Sagasta.
La fórmula para sancionar la Constitución de 1876 fue la siguiente:»Don Alfonso XII, por la gracia de Dios, rey constitucional de España. A todos los que las presentes vieren y atendieren, sabed: que, en unión y de acuerdo con las Cortes del Reino, actualmente reunidas, hemos venido en decretar y sancionar la siguiente Constitución de la Monarquía española«.
Monedas constitucionales de Alfonso XII
Así desde 1876 y hasta su muerte, en las monedas acuñadas a nombre de Alfonso XII figura la leyenda constitucional. En el reverso de la moneda aparece el texto «REY CONST(ITUCIONAL) DE ESPAÑA» junto al valor de la moneda, que en el caso de la imagen es de 5 PESETAS.
Una novedad es el cambio del escudo de España, en referencia al escudo resumido que apareció en las primeras monedas de Alfonso XII, tras la finalización del Sexenio Revolucionario.
El escudo del reverso engloba a los cinco reinos peninsulares históricos: Castilla, León, Aragón, Navarra, Granada y las Columnas de Hércules. A diferencia del escudo del gobierno provisional, en esta ocasión si que figura bajo una corona real y con la inclusión del escusón de los Borbones en el centro, las tres flores de Lis.
En el anverso aparece el retrato de Alfonso XII, más maduro que en sus primeras monedas con sólo la legitimación divina. La leyenda es ALFONSO XII POR LA G(RACIA) DE DIOS.
Así, en las monedas de Alfonso XII se pone de manifiesto la doble legitimación de la monarquía restaurada: la divina (por herencia borbónica) y la constitucional.
Las siguientes monedas de Alfonso XII, entre 1881 y 1885, aparece la misma doble legitación, pero cambiando el busto, ya que en esas monedas aparece con unas prominentes patillas.
Alfonso XII reinó hasta 1885, dado que murió de tuberculosis tres días antes de cumplir los 28 años, dejando dos hijas y embarazada a su esposa Maria Cristina, del que sería futuro rey Alfonso XIII, que fue nombrado Rey nada más nacer, siendo la regente su madre María Cristina. Al iniciar la regencia, Maria Cristina juro también la Constitución de 1876.
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